Parece que este año será el año de los dispositivos con pantallas flexibles. Samsung prometió lanzar su primer smartphone con pantalla flexible el próximo mes de noviembre, y ahora Nubia ha sorprendido a los fans con un nuevo prototipo de smartphone wearable llamado Alpha que se acopla a la muñeca como si fuera un reloj inteligente.
El Nubia Alpha sorprendió a todos los visitantes del IFA 2018 y muchos llegaron a considerarlo como “el prototipo más interesante del evento”, pues este smartphone wearable trae una espectacular pantalla OLED curvada que se adapta a la muñeca del usuario.
Pero lo mejor de todo es que no se trata de un simple prototipo, sino que el gadget entrará en producción en el cuarto trimestre del 2018 y está previsto para salir a la venta en el mercado chino.
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Nubia Alpha, un vistazo a cómo podrían ser los móviles del futuro
Si hasta hace unos cuantos años todo daba vueltas en torno a los móviles y tablets, Nubia está tratando de decir a la industria que el nuevo concepto que ha creado podría ser la siguiente evolución del mercado móvil, donde todos los teléfonos podrían ser llevados en la muñeca como si de unos relojes inteligentes se tratara.
Y lo cierto es que la línea que separa los móviles de los smartwatches es cada vez más fina. Con la llegada del Apple Watch Series 3 LTE el año pasado, junto con otros relojes con capacidad 4G LTE, muchos usuarios han dejado de usar tanto sus móviles al poder recibir y realizar llamadas directamente desde sus smartwatches.
Pero el Nubia Alpha va más allá y cuenta con una pantalla OLED curvada y flexible que se adapta a la muñeca de cualquier usuario. Eso sí, su pantalla parece más grande y más incómoda que la pantalla de un smartwatch.
Además de poder realizar llamadas, la compañía asegura que este prototipo también servirá para tomar fotos, monitorizar el deporte o pagar productos de manera inalámbrica mediante una conectividad NFC. La cámara serviría además para realizar videollamadas.
Nubia no ha desvelado otros detalles técnicos sobre este smartphone wearable, de modo que no sabemos cuál podría ser la resolución de la pantalla, qué procesador alberga, cuánta memoria interna tiene o cuánta autonomía brinda, aunque la compañía dijo al editor de The Verge que tuvo la oportunidad de ponerlo a prueba que el precio del gadget será muy similar al precio de cualquier smartphone.
Lo único malo de este wearable es que no tendrá capacidad para ejecutar aplicaciones de Android teniendo en cuenta que todos los desarrolladores deberían adaptar sus apps a la pantalla de este nuevo dispositivo. Además de que sus capacidades están limitadas como smartphone, también lo están como smartwatch, pues no cuenta con tantos sensores, aplicaciones y capacidades de monitorización como algunos de los mejores relojes GPS multideporte del mercado o como algunos de los mejores smartwatches.
